CON LA COMIDA NO SE JODE


A Daniel Scioli hay que reconocerle su honestidad brutal. En medio de un acto del partido y, ante la insólita situación que vive mi querido país a raiz de los cortes de rutas y el desabastecimiento de ciertos productos, el tipo se despacha con un poco diplomático pero muy directo : "Con la comida no se jode"

Días mas tarde la frase se transforma en estrofa de una pegadiza melodía que entonan los muchachos K en la Plaza de Mayo en un acto de apoyo al gobierno. El hit piquetero reza "Con la comida no se joooooode, con la comida no se jooooooooode, con la comida no se jooooooooooode". Para aquellos que frecuentan los estadios de futbol y para que entiendan la lírica del cantito, les cuento que cuenta con la misma partitura que la famosa "Ponga hueeeeeeeeeeeeeeeeeeeevo y Boca ponga hueeeeeeeeeeeeevo y Boca ponga hueeeeeeeeeevo y Boca ponga huuuuuuuuuuuuuuuuevo". Ahora si ¿no?. Salieri se revuelca en su tumba por no haber dado antes con semejante composición musical.

Con MI comida no se jode.

Tomando prestado el ingenioso slogan del Sr gobernador quiero y voy a adentrarme en un tema de suma importancia para todos nosotros y ustedes. Esto no se circunscribe a la comunidad diábetica sino que aplica al resto de los mortales. estoy hablando de la importancia de comer tranquilo.

Muchos estarán pensando, mientras escriben un informe con la mano derecha y engullen un sandwich con la izquierda, que esta premisa no es aplicable en los tiempos que corren. Mucha gente, sobre todo los oficinistas, saben que, en algunos casos, está mal visto que uno cometa la herejía de salir a comer algo afuera en el horario del almuerzo. Tu compañero de box te mirará torcido, tu jefe te mirará torcido y hasta el tipo que te vacía el tacho de basura te mirará torcido. El mundo de la oficina se rige por una serie de mandamientos que no se recomienda obviar. De esto ha escrito un muchacho que conozco que tiene un master en Ofi-cinismo : http://www.lavidadeoficina.blogspot.com

La comida no sólo es buena o mala según su composición en grasas y carbohidratos. Puedo estar comiendo una sanísima ensalada que me puede caer peor que comer en un puesto callejero si mientras lo hago estoy hablando por telefono con mi jefa, imprimiendo un documento, preparando un power point y tratando de mantener un diálogo coherente con esa persona que juuuuuuuuusto cae a verte en tus 15 minutos de almuerzo.

La verdad es esa. La "hora" de almuerzo es un concepto absolutamente relativo. Pocos tienen la dicha de sentarse en un restaurancito y sentar las cachas en una silla que no sea la de nuesto box. Pocos tienen la dicha de salir siquiera a cambiar de aire y de estirar las piernas. Pocos entienden de la importancia que tiene esto en nuestra salud física y mental. La "hora" del almuerzo debería durar 60 minutos y debería no servirse al costado de nuestro teclado. No quiero comentarles lo poco higiénico que puede resultar esta experiencia...

Gente. El que pueda que aproveche. Tomarse el tiempo necesario para comer como corresponde es algo que uno no debe dejar de hacer. Eso sí...si tienen la dicha de poder salir a comer fuera, despues de todo lo que les dije, mejor que no los vea con una Big Mac en la mano...

Provecho.

Comentarios

Anónimo dijo…
como se nota que están en la cuenta regresiva... hace días que no hay novedades en el blog.... A dormir ahora que en pocos días se termina el sueño!!!
Anónimo dijo…
parece ser que Ita viene con las 10.000 entradas al blog bajo el bracito!!!

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